2 de noviembre de 2011

Gili Islands



Desde Bangsai tomamos un bote que nos acerca hasta la cercana isla de Gili Trawangan. En tan solo veinte minutos llegamos a Trawangan y el panorama cambia. Una pequeña isla con arena blanca y aguas cristalinas nos está esperando.


En trawangan hay un millón de alojamientos y después de nuestra experiencia anterior buscamos uno con bastante cuidado, revisando las sabanas y los colchones para asegurarnos que estén limpios.
Finalmente encontramos uno muy bueno  aunque todos los que vemos son bastantes confortables y limpios.
Esta isla parece un lugar ideal para disfrutar unos días de hacer snorkeling y de la playa.



Gili Trawangan es lo suficientemente animada como para no aburrirse, con música en directo por las noches, pequeñas tiendas de suvenir y variedad de restaurantes, pero es lo suficientemente tranquila como para descansar.
Rodeada de arena blanca y con unas magníficas vistas, por un lado a Gili Meno, otra pequeña isla y por otro al volcán Gunung Anug de Bali, es además un lugar ideal para bucear y ver tortugas con toda seguridad.
Ataviados con nuestras inseparables gafas de bucear decidimos probar suerte y ver si es tan fácil como dicen ver tortugas.




No llevamos ni cinco minutos en el agua cuando hace acto de presencia la primera tortuga.  Nos resulta un poco increíble, pues en otros lugares donde hemos buceado no ha sido nada fácil verlas. En menos de una hora vemos seis. Nadamos junto a ellas y observamos muy de cerca como sacan la cabeza fuera del agua para respirar. Son tan bonitas que podríamos pasarnos todo el día dentro del agua observándolas.
La visibilidad es buenísima y a veces nos da la sensación de estar dentro de un acuario. Miles de peces de colores nos rodean y nos miran con curiosidad y descaro. Enormes bancos de pequeños peces aparecen de vez en cuando y llenan de color todo nuestro campo de visión.



El coral es bonito, pero debido a la pesca con explosivos empleada antiguamente está muy deteriorado y no es espectacular.
Los días pasan con calma y sin grandes novedades. 





Trawangan es una isla que vive del turismo, en su primera línea de playa todo está dedicado al turismo, pero en la parte interna de la isla existe otra realidad y puedes ver lo humildes que son muchos de sus habitantes que viven muy al margen del turismo en sus pequeñas casas de bambú.
Suena la música y no es la de ningún restaurante ni chiringuito, es música en directo pero tradicional, salimos de nuestra habitación y seguimos el sonido de la música. Rápidamente llegamos a una especie de fiesta donde todos los locales sonríen y se divierte. Hay un escenario donde una chica canta y baila ataviada con una faldita dorada de lo más moderna. Nos invitan a pasar y a que nos sentemos. Sin dudarlo entramos y nos dan unas cajitas con unos dulces, agua y un plátano y nos dicen que es gratis que se debe a la celebración de una boda. De repente vemos a los novios al lado del escenario, como siempre,muy serios y acompañados de dos niñas que hacen de damas de honor que les abanican continuamente. Ella  lleva un traje de novia blanco como los de occidente y él un traje gris algo antiguo. Son  musulmanes pero las mujeres no suelen llevar velo y la ceremonia es una mezcla entre hindú y musulmana.

Al día siguiente pasean por todo el pueblo.


No vemos el día de abandonar la isla, pero después de diez días de relax, ya hemos cargado de nuevo las pilas para continuar nuestra aventura, asi que mañana partiremos de nuevo hacia Sengig para alquilar una moto y recorrer todo Lombok, Sumbawa, Komodo y Flores.



3 comentarios:

  1. ¿Pero donde encuentras esos sitios tan
    maravillosos? que guapa estas Yeni,pareces una
    sirena saliendo del agua. Arco Iris.

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  2. Que grata experiencia ver las tortugas asi,
    en libertad y tan cerca,preciosas las fotos.
    Felicitaciones por ello.
    Un abrazo. Edelweiss.

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  3. 1!1 Que maravilla que bonito fondo marino!!!.
    Saludos, Trebol.

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