17 de septiembre de 2011

Berastagui


Una opelet (furgoneta) nos lleva a Medan y allí tomamos un autobús hasta Berastagui. Esta vez los conductores paran menos, pero siguen siendo trayectos super largos para los pocos kilómetros que hacemos.
Hacemos noche en Berastegui con la idea de subir al día siguiente al volcán Gunung Sibayak. Por la tarde tenemos tiempo de dar un paseo por el mercado, comprar algo de fruta y comer unos mie goreng buenísimos por unos cincuenta céntimos de euro. La gente es agradable y curiosa, pero aquí no saben nada de inglés.


Subimos el volcán con mucha facilidad. En el camino nos encontramos con un colegio entero de excursión que nos acompañarán durante todo el día. Nos reímos muchísimo con ellos. Se han subido con las guitarras hasta la cima y se ponen todos a cantar como locos. De música internacional solo conocen el Waka-waka de Shakira, tampoco es de extrañar que no conozcan el Mc Donals, pero cuando les decimos que somos de España, todos te pueden decir más de quince jugadores del Madrid o el Barsa.
Todos nos llaman mister o sir y misis.




Por el camino de bajada se terminan de romper mis zapatillas y llego casi descalzo. Antes de volver a Berastagui pasamos andando por algunos pueblos muy auténticos, llenos de niños.


A la noche nos deleitamos con un buen pescado a la barbacoa en un puesto de la calle, que nos sabe a gloria.

Al día siguiente visitamos las aldeas de  Kabanjahe, Lingga y Dokan con casas Batak tradicionales y las cascadas de Sipiso-piso, bastante espectaculares, con unas vistas formidables del lago Toba.
Tomamos hasta nueve opelet para llegar a todos estos sitios. Los locales se asombran de vernos viajando de esta manera, pero es muy divertido.










1 comentario:

  1. Genial!!! Antonio rodeado de niños aprendiendo
    la numeracion, y menuda juerga
    tenian los niños.
    Un beso. Arco Iris.

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